Círculos de literatura juvenil
Los Círculos de Literatura para Jóvenes Adultos son minidebates entre iguales para que los estudiantes entablen un diálogo sobre el libro que leen en voz alta acerca de la literatura que resuena con sus experiencias personales. No sólo desarrollan la capacidad de razonamiento, sino también la pasión por la lectura y la formación de conductas a través del estudio y la interacción con la literatura.
Un club de lectura de literatura juvenil contaría con una selección de escritos variados y conocidos, un formato de debate circular colegiado y en parte independiente, así como funciones para los miembros como un líder de debate y un resumidor. Por ejemplo, los adolescentes podrían explorar un libro muy querido como "The Hate U Give" y narrar sobre identidad y justicia social, lo que a su vez facilitaría las conexiones personales y el diálogo crítico.
Novelas juveniles Círculos de alumnos la comprensión lectora y la capacidad de análisis que más provecho sacan de ellas. Se consideran un espacio del aula donde se escucha la voz de los alumnos, se desarrolla la empatía a través de diferentes ideas y se comparte el aprendizaje que se realiza. Por ejemplo, los alumnos pueden leer y hablar sobre un libro titulado "The Perks of Being a Wallflower" para comprender mejor los problemas de salud mental y desarrollar la inteligencia emocional.
Un animador de un Círculo de Literatura para Jóvenes Adultos es una persona que dirige los debates, centra la atención y fomenta la participación sin apoderarse de la conversación. Puede sugerir temas de debate o preguntas que ayuden al análisis, pero lo preferible es que sean los alumnos quienes controlen la charla. Esta forma de aprendizaje da independencia a los alumnos y, en consecuencia, les hace observar sus progresos en áreas como los círculos literarios, tanto si están a cargo de los profesores como de sus compañeros.
Los profesores pueden organizar estos Círculos de Literatura Juvenil con la ayuda de libros que se centren específicamente en los intereses de los alumnos y en sus antecedentes culturales reales, y reuniendo después pequeños grupos diversos de estudiantes. Además, dar a los alumnos las directrices y los materiales de referencia para el debate también puede ayudar, además de proporcionarles la flexibilidad de seleccionar sus propios textos para leer. Una alternativa es integrar libros como "Eleanor & Park" o "Buscando a Alaska", que permitirán a los alumnos trabajar eficazmente con el material.