PLC (Comunidades Profesionales de Aprendizaje)
Las Comunidades Profesionales de Aprendizaje (Professional Learning Communities, PLC) son grupos de profesores que cooperan para tomar las decisiones más adecuadas para el aprendizaje de sus alumnos en las que aprenden de forma paralela y se transmiten información unos a otros. Como ahora la gente es más innovadora y creativa, la visión compartida, el trabajo en equipo y la colaboración influyen en la eficacia del proceso de enseñanza-aprendizaje, las PLC son la principal fuente de refuerzo de la enseñanza.
El liderazgo colaborativo, la participación del personal en la toma de decisiones y, sobre todo, la mejora del aprendizaje de los alumnos caracterizan a los PLC. Los participantes celebran asambleas periódicas para analizar el rendimiento académico de los alumnos, sobre todo de los más problemáticos, intercambiar métodos útiles para impartir la asignatura y evaluar los resultados de los exámenes de sus alumnos para modificar y adaptar sus futuras clases. Por ejemplo, hay un caso en el que un grupo de profesores de matemáticas se reúne a diario para analizar los resultados obtenidos por los alumnos y abordar las preocupaciones comunes sobre las dificultades que experimentan algunos de ellos.
Los PLC escolares pueden influir en el nivel de logros de los alumnos modificando las metodologías de enseñanza en consonancia con las estrategias basadas en pruebas que han demostrado su eficacia en el aprendizaje. En otras palabras, cuando los profesores trabajan juntos para revisar los datos de los alumnos y también se proporcionan recursos unos a otros, pueden modificar eficazmente la clase para alcanzar los requisitos de todos los alumnos. Las investigaciones demuestran que las instituciones que han adoptado PLC experimentaron un aumento significativo en las puntuaciones de los alumnos en los exámenes y en el rendimiento académico en general.
Debido a diversas razones, como el cumplimiento de los plazos, la oposición a los cambios y los distintos grados de devoción entre los equipos, los PLC se enfrentan a grandes dificultades. Al igual que el resto de profesores, los educadores pueden encontrar difícil la colaboración entre ellos, teniendo en cuenta la carga que supone la docencia, incluido el abrumador papeleo y otras responsabilidades. Pueden organizar espacios de tiempo antes o después de las clases, en los que todos los miembros del PLC sientan la diferencia y vean los beneficios de la colaboración. Esto, a su vez, crearía un entorno social positivo en el que todos los miembros se apoyarían mutuamente.
Para implantar eficazmente las PLC, los centros escolares deben empezar por impartir formación sobre prácticas de colaboración y crear un marco claro de objetivos y expectativas. Lo más esencial es elaborar un plan de reuniones periódicas y promover una cultura de comunicación abierta. Por ejemplo, un centro puede organizar una PLC piloto para mejorar la alfabetización, en la que los profesores puedan hablar de las estrategias que han funcionado y luego ajustar sus métodos en función de las reacciones y los resultados.