Pruebas fuera de nivel
Las pruebas fuera de curso consisten en someter a los alumnos a pruebas que no coinciden con sus calificaciones actuales, normalmente con el propósito de averiguar sus capacidades más allá de las expectativas estándar. Se trata de un enfoque muy importante porque ayuda a identificar las capacidades avanzadas y las lagunas de aprendizaje y orienta las intervenciones más adecuadas.
Las pruebas fuera de nivel están destinadas principalmente a evaluar a los alumnos que puedan estar rindiendo por encima o por debajo de su nivel de grado. Los profesores pueden utilizar este tipo de pruebas para reconocer la necesidad de que los alumnos avanzados reciban un plan de estudios más difícil o para encontrar alumnos con dificultades con conceptos básicos y proporcionarles ayuda específica para que alcancen su rendimiento académico.
El Out-of-LevelTesting se suele llevar a cabo ofreciendo exámenes estandarizados que están pensados para cursos superiores o inferiores al del alumno. Por ejemplo, un alumno avanzado de quinto curso que lee bien puede realizar un examen de lectura de séptimo curso para evaluar correctamente sus competencias. Esto también es posible en condiciones controladas, asegurándose de que el entorno es el adecuado para una evaluación justa.
El potencial de las pruebas fuera de nivel para ofrecer materiales de lectura horizontales que promuevan el compromiso de los alumnos, mediante materiales de lectura de dificultad adecuada, y el suministro de información sobre estrategias de instrucción apropiadas está bien reconocido. Por ejemplo, un alumno marcado como avanzado puede seguir cursos de enriquecimiento que le mantengan motivado; sin embargo, los que van por detrás del nivel del curso pueden recibir ayuda de recuperación centrada en sus necesidades particulares, lo que a la larga beneficia a todo el rendimiento académico.
Ciertamente, las pruebas fuera de nivel son objeto de críticas por la posible mala asignación de los alumnos, que puede fomentar sentimientos de frustración o desconexión cuando una lección es demasiado difícil o demasiado fácil para un alumno. Además, a menudo se cuestiona la cuestión de la validez y fiabilidad de las pruebas cuando se administran más allá del nivel de grado correspondiente. Pensemos, por ejemplo, en un alumno que no sólo tiene conceptos erróneos sobre un tema, sino que además responde incorrectamente a la prueba de nivel superior porque aún no está familiarizado con el formato de la prueba.