Práctica de intercalación
Velvet interleaving practice, las estrategias de aprendizaje son alternativas al estudio tradicional de un tema o destreza a la vez y son mezclas de diferentes temas o destrezas durante las sesiones de estudio. La mezcla de los tangenciales es principalmente un aumento en la retención y una mejora de la comprensión por la promoción de la vinculación de las ideas y la flexible de la aplicación de conocimientos en diversos contextos. El aprendizaje intercalado proporciona al alumno una mayor comprensión que el aprendizaje secuencial.
Intercalar la práctica conlleva una serie de ventajas, como una mejor retención y una mayor comprensión del material. La necesidad de cambiar constantemente de asignatura hace que los alumnos realicen la rutina, lo que en última instancia redunda en una mejor comprensión de los procesos. Por ejemplo, un estudiante de matemáticas puede mezclar álgebra, geometría y cálculo durante sus prácticas y, de este modo, mejorará todas las destrezas en cada uno de los temas sin caer en la monotonía en ninguno de ellos.
La práctica intercalada difiere de la práctica bloqueada, que consiste en que el alumno se centre en un único tema o destreza durante un periodo prolongado antes de pasar al siguiente. Aunque, durante algún tiempo, la práctica bloqueada puede desarrollar principalmente la sensación de seguridad en uno mismo y la comprensión, el método de intercalación ha demostrado ser más eficaz para lograr la retención y la adaptabilidad a largo plazo. Un buen ejemplo de lo anterior es el caso de un jugador de baloncesto que acumula las probabilidades de lanzar tiros libres haciéndolo una y otra vez (práctica bloqueada) pero acaba mostrando un rendimiento pobre durante el partido real en comparación con otro jugador que practica el lanzamiento de tiros libres junto con otros ejercicios como el regate y el pase (intercalación) y, por tanto, se adapta mejor a las situaciones del juego.
La práctica intercalada resulta especialmente práctica en asignaturas en las que se aplican diversos conceptos y destrezas de resolución de problemas, como las matemáticas, el aprendizaje de lenguas y las ciencias. Por ejemplo, un estudiante de idiomas que domine el vocabulario, la gramática y la pronunciación puede practicar la intercalación en una sección de estudio en la que utiliza las palabras en diferentes contextos, lo que aumenta su fluidez general en lugar de limitarse a memorizar elementos aislados.
Para ejercitar la intercalación, los alumnos pueden diseñar un plan de estudio que incorpore distintos temas o problemas del mismo tipo en la misma sesión. Por ejemplo, el alumno puede empezar con 15 minutos de problemas de matemáticas, pasar después a la comprensión lectora y terminar con un breve repaso de vocabulario. Al mismo tiempo, el alumno también puede practicar la repetición espaciada con temas intercalados que, en este caso, pueden resultar más provechosos, ya que permiten volver a repasar el contenido con intervalos estratégicos para obtener el mejor efecto.