IDEA (Ley de Educación de Personas con Discapacidad)
La Ley de Educación de Personas con Discapacidad (IDEA) es una ley estadounidense que prevé que los niños discapacitados tengan cubiertas sus necesidades únicas mediante la provisión de una educación apropiada y gratuita en las escuelas públicas. IDEA se centra en los IEP (programas educativos individualizados), así como en la inclusión de los alumnos, que son las dos tendencias principales que promueven el éxito educativo de las personas con discapacidad.
El objetivo fundamental de la IDEA es garantizar que los niños con discapacidades puedan recibir una educación pública gratuita y adecuada, diseñada explícitamente para sus necesidades. Esto implica la prestación de servicios de apoyo y adaptaciones esenciales, lo que permite a los alumnos participar plenamente en el aprendizaje y desarrollar su potencial académico.
Un Programa Educativo Individualizado (PEI) es un documento elaborado que hace referencia a los objetivos de aprendizaje, los servicios y las soluciones para un alumno discapacitado. El IEP tiene unos componentes básicos: el nivel actual de rendimiento del alumno, los objetivos educativos específicos, los servicios que se le van a prestar (como logopedia u orientación) y la forma en que se le motivará. Por ejemplo, un IEP puede incluir el requisito de que un alumno reciba 30 minutos de logopedia a la semana.
Según la ley IDEA, la participación de los padres tanto en la elaboración como en la aplicación del IEP de su hijo es imprescindible. Esto incluye que los padres asistan a las reuniones, aporten información sobre las necesidades de su hijo y reciban actualizaciones periódicas sobre sus progresos. Los padres pueden fijar objetivos específicos para su hijo y abogar por los servicios necesarios durante la reunión del IEP.
Según la Ley de Educación de Personas con Discapacidad (IDEA), los niños con discapacidad tienen derecho a una educación pública gratuita y adecuada (FAPE), a recibir enseñanza en el entorno menos restrictivo (LRE) y a contar con un programa educativo individual (IEP) diseñado exclusivamente para sus necesidades. Además, también están facultados para impugnar cualquier decisión que pueda afectar a su colocación y servicios educativos. Por ejemplo, si los padres no están de acuerdo con el IEP propuesto por la escuela, pueden solicitar una mediación o una audiencia con las debidas garantías procesales.