Alineación con el marco (normas)
El proceso de alineación de los contenidos educativos, las evaluaciones y las prácticas de instrucción con los estándares se denomina alineación del marco (estándares). La alineación es el principal factor para garantizar unos resultados de enseñanza y aprendizaje adecuados, ya que ofrece a los profesores la posibilidad de impartir un plan de estudios coherente que no sólo satisfaga las necesidades de los alumnos, sino que también se ajuste a las normas de calidad establecidas.
En el ámbito académico, la alineación de los marcos es de gran importancia porque es la única admisión para educar con eficacia y cumplir los estándares educativos pertinentes. La instrucción cooperativa de las prácticas adoptadas con los resultados de aprendizaje establecidos, los profesores encuentran rutas más eficaces para el aprendizaje de los estudiantes, y también estarán mejor preparados para las pruebas de rendimiento y otros temas que están involucrados, por lo tanto, un mayor nivel de rendimiento de los estudiantes, y la responsabilidad de los estudiantes será.
La revisión y el ajuste sistemáticos de su plan de estudios de acuerdo con las normas específicas de las autoridades educativas ayuda a los profesores a conseguir la alineación con el marco. Algunas de las actividades que llevan a cabo los profesores son colaborar en la preparación de planes de clases, evaluaciones y estrategias de enseñanza que reflejen las normas, así como asistir a sesiones para el desarrollo profesional continuo de las mejores prácticas y normas.
Los Estándares Estatales Básicos Comunes (CCSS) utilizados para la alineación en la educación K-12 en los Estados Unidos y el esbozo de expectativas claras para el aprendizaje de los estudiantes en matemáticas y lengua inglesa son ejemplos específicos de los marcos. Los Estándares Científicos de Próxima Generación (NGSS) son otro ejemplo, ya que destacan las prácticas científicas y los conceptos transversales para reforzar el plan de estudios STEM.
Entre los retos que hay que superar figuran la reticencia a cambiar de educadores humanos acostumbrados a sus propias prácticas, la falta de materiales para la formación de competencias y la naturaleza polifacética de la alineación de distintos planes de estudios en varias asignaturas y grados. Además, conseguir que todos los implicados, como los padres y los administradores, conozcan y apoyen el proceso de alineación puede suponer un obstáculo considerable.