Enseñanza basada en la evaluación
Planificación de la intervención: Esta sección se centra en los distintos tipos de planes que pueden diseñarse para ayudar a los alumnos a alcanzar sus objetivos educativos. La planificación adecuada de las intervenciones incluye la provisión de todos los detalles necesarios, flexibilidad para realizar cualquier cambio necesario y disponer de plazos claros para evaluar si el plan ha tenido éxito o no. La sección habla principalmente de los distintos tipos de planes que pueden diseñarse para ayudar a los alumnos a alcanzar sus objetivos educativos. Con el objetivo de proporcionar a los alumnos unas condiciones de aprendizaje óptimas, los planes de intervención deben contener el paso de instrucción necesario para los alumnos y el tiempo de clase. Además de los planes de clase básicos, otros tipos de planes son los complementarios y los alternativos. Consisten básicamente en las distintas formas en que los profesores imparten la lección o en algunos materiales adicionales que añaden para que los alumnos aprendan mejor.
Los aspectos fundamentales de la enseñanza basada en la evaluación son las evaluaciones formativas, las evaluaciones sumativas y el análisis de datos. Las evaluaciones formativas se llevan a cabo en el transcurso del proceso de aprendizaje para valorar el grado de absorción del alumno y, por tanto, modificar la instrucción. En cuanto a las evaluaciones sumativas, se utilizan principalmente para realizar la evaluación del aprendizaje de los alumnos al final del periodo de instrucción. El análisis de datos, por su parte, es el proceso de interpretación de los resultados de la evaluación para trazar los patrones o tendencias existentes que influyan en las técnicas de enseñanza para el futuro.
La enseñanza basada en la evaluación es una de las estrategias que pueden influir directamente en los resultados de aprendizaje de los alumnos. Lo hace dándoles información específica, que a veces no entienden, y ofreciéndoles experiencias de aprendizaje personalizadas. A modo de ejemplo, un profesor que identifica a través de los tests que la mayoría de los alumnos tienen dificultades con un concepto matemático concreto, muestra a estos últimos el plan del horario de enseñanza cambiándolo para centrarse en esa parte. El estilo personalizado de enseñanza apoya la superación de las lagunas personales de aprendizaje de los alumnos, lo que a su vez es la base del aumento general de los logros de los alumnos.
Hay dos tipos de evaluaciones utilizadas en la enseñanza basada en la evaluación: las formativas y las sumativas. Las evaluaciones formativas son las que, como los cuestionarios, los debates y las observaciones en clase, proporcionan información continua a alumnos y profesores. Las evaluaciones sumativas, por ejemplo, los exámenes finales o los proyectos, son los medios para evaluar el conocimiento total, así como las habilidades al final de una unidad. El uso simultáneo de estos tipos de evaluación ayuda a mejorar continuamente los métodos de los profesores gracias a los resultados de los alumnos.
Los datos son muy importantes en el enfoque de la enseñanza basada en la evaluación, ya que orientan las decisiones y las prácticas educativas. Los profesores examinan los datos de las evaluaciones para conocer los puntos fuertes y débiles de los alumnos, lo que les permite diferenciar la enseñanza. Por ejemplo, si los datos indican que los alumnos rinden bien en comprensión lectora pero tienen problemas con el vocabulario, un profesor puede hacer hincapié en los ejercicios de refuerzo del vocabulario. Este planteamiento de utilizar los datos como fuente primaria de enseñanza y aprendizaje garantiza que la enseñanza esté continuamente asociada a las necesidades de los alumnos.