Bibliografía comentada
Una anotación bibliográfica es un catálogo de referencias a libros, artículos y otros recursos, acompañado de una breve descripción y evaluación de cada fuente. Se utiliza para resumir y evaluar la pertinencia, exactitud y calidad de las fuentes utilizadas en la investigación, con el fin de convencer de la conveniencia de renovar o desarrollar nuevos proyectos de investigación.
La función principal de una bibliografía comentada es ofrecer una visión exhaustiva de las fuentes utilizadas en un proyecto de investigación concreto, al tiempo que se destaca su relevancia y contribución al tema tratado. Sirve a los investigadores para estructurar su mente, evaluar la credibilidad de sus fuentes y también a los lectores para hacerse una idea de los antecedentes y la importancia de la investigación. Por ejemplo, una bibliografía comentada puede resumir los puntos esenciales de un libro sobre el cambio climático, lo que a su vez ayudará al lector a detectar las lagunas en la bibliografía disponible.
Elaborar una bibliografía comentada consiste, en primer lugar, en recopilar una lista de materiales y datos adecuados para su estudio. Cada elemento comenzará con una cita completa en el estilo requerido, como APA o MLA, a la que seguirá una breve sinopsis de los puntos más importantes de la fuente, un juicio de valor sobre su credibilidad y una declaración sobre su relevancia para tu investigación. A modo de aclaración, si, por ejemplo, hace referencia a un artículo de una revista sobre técnicas de enseñanza, su anotación podría, por ejemplo, exponer las conclusiones y su aplicación en la enseñanza.
Las bibliografías comentadas deben incluir anotaciones que presenten un resumen del contenido de la fuente, una evaluación de su credibilidad y relevancia, y una explicación de su contribución a la investigación. Esto podría consistir en señalar las cualificaciones del autor, la metodología de la fuente y el carácter distintivo de la fuente en comparación con otras fuentes. Por ejemplo, si una fuente consiste en resultados originales de investigación, la anotación debe ser explícita sobre esta característica y lo que significa para la disciplina.
Se suelen ver tres tipos de anotaciones: descriptivas, evaluativas y reflexivas. Las descriptivas incluyen un resumen del contenido; las evaluativas, una valoración de la credibilidad y relevancia de la fuente; y las reflexivas, por su parte, se centran en analizar cómo se integra la fuente en tu investigación o cómo aporta información a tu perspectiva. Por ejemplo, una anotación descriptiva se centra en resumir un documento histórico, mientras que una anotación reflexiva puede analizar cómo influye ese documento en tu visión del acontecimiento histórico.