Coaching académico
Un tutor académico es una forma personalizada de ayudar a los estudiantes a alcanzar sus objetivos educativos. Es una combinación de tutoría individualizada, desarrollo de habilidades y estrategias de aprendizaje eficaces, por lo que tiene un papel vital en la mejora del rendimiento académico y el aumento de la confianza.
Las principales ventajas del coaching académico son unos mejores resultados académicos, unos hábitos de estudio más refinados y una mayor motivación. Por ejemplo, un estudiante con problemas de gestión del tiempo puede estudiar la forma de ordenar las tareas correctamente, lo que le permitirá obtener buenas notas y reducir el estrés.
La tutoría es prácticamente la única forma de adquirir conocimientos sobre materias específicas; sin embargo, el coaching académico es un enfoque más amplio que aborda el desarrollo de las estrategias generales de aprendizaje, el establecimiento de objetivos y el desarrollo personal. Un buen ejemplo de ello es que un tutor puede ser una persona que ayuda a un estudiante a aprender a estudiar bien y a desarrollar la autodisciplina, en lugar de limitarse a ayudarle a hacer los deberes.
El coaching académico puede maximizar el potencial de distintos tipos de estudiantes, así como ayudar a los que tienen dificultades académicas, a los de alto rendimiento y a cualquiera que quiera estudiar con eficacia. Por ejemplo, un estudiante de secundaria que se esté preparando para las pruebas de acceso a la universidad podría utilizar el coaching para mejorar sus estrategias de realización de exámenes y disminuir la ansiedad.
Los preparadores académicos utilizan distintas herramientas, como la fijación de objetivos, las estrategias de gestión del tiempo y los planes de aprendizaje personalizados, para ayudar a los estudiantes. Un tutor, por ejemplo, puede colaborar con un alumno para elaborar un calendario de estudio que se corresponda con su patrón de aprendizaje, ayudándole así a preparar los exámenes con éxito.